Sentir

Cuando te dicen "te quiero" y respondemos, ese casi automático "yo también", frió, actuado, con una sonrisa que si la forzamos forzamos un poco mas, puede romperse, nos preguntamos dentro de nuestra cabeza ¿ Que te pasa? ¿Por que no siento nada?. Cuando ponemos una serie, o una película pero nos aburre, no le encontramos la vuelta y la saco porque no quiero desperdiciar dos horas de una película o cuarenta y cinco minutos de un capitulo, donde me cuentan la vida de alguien, de una vida que no es mía, ni lo va a ser algún día, pero vivir tu vida tampoco es una opción. 

Inventamos ruidos cuando estamos solos, pensamos en nuestras inseguridades, pero el miedo no se asoma ni por casualidad, esta ausente. 

Quizás nos ponemos a recordar momentos que ya pasaron, que no van a ser igual, que hasta pareciera que lo vivimos en otra vida, porque ya no somos iguales; nos acordamos de los que ya no están, pero no tiene caso, ni una lagrima se nos escapa aunque invoquemos a la nostalgia, no sentimos nada.

Quizás salgo a correr, hasta que las piernas me duelan, con tal de sentir, de sentir que todavía puedo sentir, parece un trabalenguas repetitivo, pero a veces nos olvidamos que era "sentir".

Preferiría mil veces tener piel de gallina, cuando alguien que quiero me abraza y no la quiero soltar, optaría repetir dos o tres veces "yo también te quiero" porque siento que con una sola vez no basta, porque no se cuando pueda tener la oportunidad de volver a decirlo.

Elegiría tenerle miedo a las arañas, a los payasos, a la oscuridad, a quedarme sin voz en medio de una presentación oral en la facultad, para darme cuenta de que estoy vivo.

Quisiera sentir otra vez esa adrenalina que me recorre todo el cuerpo cuando voy a ver a alguien por primera vez, verla desde lejos y calcular todo lo que puedo decir, hacer, hasta planear de que manera saludar.

Quiero salir a correr como si corriera la maratón de mi vida, esa que me consagraría como el mejor atleta, donde el corazón se pase de revoluciones y me haga cuenta de que ¡Estoy vivo!

"Tenemos que agradecerle a Dios que estamos vivos" escuche alguna vez por ahí... Perdon, pero soy un desagradecido entonces, pero a veces estar vivo, no me alcanza, siento que algo me falta porque hay momentos en los que me muero por dentro.